Resumen
El ambiente crispado generado en la capital del virreinato mexicano como consecuencia de la aplicación del programa reformista borbónico tuvo también su dimensión, como no podía ser de otra forma, en el seno del Cabildo catedralicio. El autoritarismo del arzobispo Francisco de Lorenzana y su decidido empeño de sanear las instituciones eclesiásticas, sin respetar las costumbres seculares ni la tradición de la Iglesia criolla, y la expulsión de la Compañía deJesús, fueron factores que incidieron notablemente en el sentir de algunos capitulares.